Alternativas al elogio

Hace poco os hablaba del método educativo Montessori.

En dicho método no se elogia a los niños por el trabajo bien hecho, igual que no se corrige cuando lo hacen mal. La mayoría de las actividades tienen un control de error implícito que enseña al niño si ha finalizado la actividad con éxito o no.

El elogio a largo plazo puede llegar a crear niños con una gran necesidad de aprobación externa de la que dependerán toda su vida. Y esto, si lo pensamos bien, no es muy bueno. Todos queremos hijos independientes en todos los sentidos, y este es un punto importante.

Ahora te estarás preguntando: Pero ¿Entoces qué digo o hago cuando el niño venga a enseñarme algún trabajo, dibujo, etc?

Pues hay otras alternativas según ésta página:

1. Vaya! y sonreir. Después dejaremos un espacio al niño para que nos cuente algo mas sobre el tema.

2. Cuéntame algo sobre esto! Fomentaremos la comunicación con el niño y aprenderemos bastante sobre su forma de pensar.

3. Veo que tu .....  Por ejemplo: Veo que has utilizado pintura rosa y azúl para el gato. Cuéntame porqué.

4. Se ve que estás orgulloso, verdad? Estoy contenta que tu ..... Por ejemplo: Se te ve orgulloso, verdad? Estoy contenta que hayas sabido cortar la fruta tu solo. Ahora cuando tengas hambre podrás servirte tu mismo.

5. Describe y pregunta cómo lo hizo

6. Gracias! Una palabra sencilla pero que dice mucho.

7. Describe y aprecia el esfuerzo realizado. Por ejemplo: Has llenado el lavaplatos perfectamente. Aprecio tu esfuerzo por ayudar. 

8. Se te ve contesto!

9. Estoy contenta por ti porque .....

10. Cuál fue la parte más fácil y la más difícil?

11. Cuando yo era pequeña me gustaba ... Te gusta hacerlo a ti también? 

12. Vaya! Me enseñarás a hacerlo a mí? 

13. Vaya! Me pregunto que podrás hacer después.

14. Lo has conseguido! 

15. Me he dado cuenta que has estado ....

16. Qué has aprendido al hacer eso? 

17. Cómo se te ocurrió la idea para hacer esto?

18. Seguro que estás creciendo! Me acuerdo cuando todavía no eras capaz de hacer... y ahora puedes ...

19. Un abrazo o palmada en la espalda.

Como todo en esta vida, lleva tiempo y paciencia el cambiar los hábitos, pero si lo conseguimos nuestros hijos serán más comunicativos e independientes.